Corredor Rojo: Red criminal DESA deja carta amenazante
Criminales atacan bus del Corredor Rojo: disparos, miedo y un mensaje que confirma una guerra por el control del transporte urbano
La violencia del crimen organizado ya no distingue entre combis informales ni grandes operadores de transporte.
Esta vez, un bus del Corredor Rojo fue atacado a balazos en el distrito de Ate, mientras transportaba a decenas de pasajeros, quienes vivieron momentos de pánico, echándose al piso para protegerse de las balas.
La madrugada del viernes, dos delincuentes a bordo de una motocicleta siguieron a la unidad de la ruta 201, en plena prolongación de la avenida Javier Prado.
No solo dispararon contra el parabrisas, sino que dejaron un paquete con una carta intimidatoria firmada por la banda criminal DESA, conocida por asesinar a choferes que no pagan cupos de extorsión.
Según los expertos, estos ataques revelan una guerra encarnizada entre bandas rivales que buscan dominar nuevas zonas de recaudo.
"Ya no solo extorsionan a mototaxis o combis, ahora apuntan a empresas formales como el Corredor Rojo o el Metropolitano", alertó Luis Quispe Candia de Luz Ámbar.
Los criminales ya no temen disparar contra buses llenos de usuarios, en zonas tradicionalmente más seguras como el límite de La Molina y Ate.
Especialistas advierten que esta nueva modalidad criminal podría escalar aún más si las autoridades no implementan estrategias específicas contra estas organizaciones.
La banda DESA, cuyos principales cabecillas fueron capturados en febrero, parece haberse reorganizado y busca recuperar terreno, enviando mensajes de terror a través de estos atentados.
La situación es crítica. Tanto choferes como pasajeros ahora viajan expuestos a morir en cualquier momento, víctimas del fuego cruzado entre extorsionadores.
La necesidad de un operativo contundente para frenar esta guerra criminal se vuelve urgente, antes que el transporte público formal se vea aún más secuestrado por el terror.