Hoy:

    Empate técnico marca la segunda vuelta presidencial en Ecuador

    Con una contienda ajustada y temas clave como la inseguridad y la crisis económica, Daniel Noboa y Luisa González se preparan para pelear voto a voto este domingo.

    Foto: AFP - Video: Canal N

    Este domingo, Ecuador vivirá una jornada electoral decisiva cuando los ciudadanos elijan a su nuevo presidente en la segunda vuelta entre Daniel Noboa y Luisa González. Según las últimas encuestas, ambos candidatos se encuentran en un empate técnico, lo que augura una elección sumamente reñida, donde cada voto será crucial.

    El actual presidente de Ecuador, Daniel Noboa, de 37 años, ha basado su campaña en la seguridad y la lucha contra el narcotráfico. A lo largo de su mandato, ha implementado diversas operaciones militares para combatir la violencia derivada del crimen organizado, lo que le ha valido el apoyo de un sector de la población que clama por mano dura. Noboa ha declarado: “Porque nunca retrocederemos lucharemos contra la narcopolítica, la corrupción y el crimen en todos los sentidos”.

    Por su parte, Luisa González, quien se presenta como la candidata de la oposición y heredera del exmandatario Rafael Correa, ha centrado su mensaje en la justicia social y la cercanía con la gente. González ha hecho un llamado a la unidad y el trabajo conjunto, destacando en sus mítines: “Por eso estamos aquí para que el poder no sea para aplastar sino para servir, para trabajar en conjunto… amarillo, azul y rojo, la bandera patria”.

    El contexto en el que se desarrollan estas elecciones es complejo: Ecuador atraviesa una profunda crisis económica, marcada por la escasez de empleos y el aumento de la violencia vinculada al narcotráfico. En el último año, más de 30 políticos y autoridades han sido asesinados por el crimen organizado, lo que ha obligado a los candidatos a hacer campaña con fuertes medidas de seguridad.

    En la primera vuelta, la diferencia entre Noboa y González fue mínima, apenas un 0,17%, lo que promete una segunda vuelta muy disputada. Ambos candidatos están movilizando a sus seguidores en una lucha voto a voto, conscientes de que cualquier error podría inclinar la balanza.

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