Hoy:

    Ronny Shapiama: De promesa del cine a acusado de delitos graves

    El actor en las películas “Guerrero” y “La Foquita” cayó preso tras ser acusado de balaceras mortales y asaltos a mano armada en Villa El Salvador.

    Foto y video: América Noticias

    Ronny Shapiama Wickham alguna vez fue la promesa del cine peruano. El niño que personificó a Paolo Guerrero en la pantalla grande, que caminó sobre alfombras rojas, soñó con ser futbolista profesional y provocó sonrisas con su carisma, hoy enfrenta su papel más oscuro: el de un acusado de homicidio calificado, señalado como responsable de la muerte de dos adolescentes y de diversos robos a mano armada en Villa El Salvador.

    A sus 19 años, la vida de Ronny cambió radicalmente. Atrás quedaron las cámaras de cine, los flashes de la fama y los aplausos.

    Hoy, esposado de pies y manos, permanece bajo prisión preventiva por nueve meses mientras enfrenta un proceso judicial que revela su transformación en un presunto delincuente de extrema peligrosidad.

    De la gloria cinematográfica al inicio de una vida criminal

    En 2016, Ronny Shapiama fue elegido entre más de 5 mil niños para interpretar a Paolo Guerrero en su infancia en la película “Guerrero”. Su naturalidad frente a cámaras y su simpatía cautivaron al público.

    Su participación en el filme “La Foquita: el 10 de la calle” reforzó su ascenso artístico, y su talento también lo llevó a las canteras del club San Martín de Porres como prometedor delantero.

    Pero con los años, aquel niño lleno de ilusiones comenzó a perder el rumbo. Primero llegaron las fotografías y videos en redes sociales, donde posaba con armas de fuego, proyectando una imagen totalmente opuesta a la que alguna vez enamoró a todo el país.

    La historia de Ronny había comenzado a reescribirse... y ya no era una de éxito, sino de violencia.

    Acusado de dos homicidios: dos adolescentes muertos

    La policía señala a Shapiama como el autor material de dos asesinatos. El primero ocurrió en julio de 2024. Según las investigaciones, Rony descendió de un mototaxi tras recibir una piedra lanzada por el adolescente Fabricio Oblitas, de 17 años, quien jugaba fútbol en una loza deportiva.

    Sin dudarlo, el actor sacó un arma de fuego y disparó en varias oportunidades, impactando en la cabeza y el cuerpo del menor, quien no sobrevivió.

    El segundo crimen vinculado a Ronny Shapiama ocurrió en septiembre de 2024, cuando el adolescente Fabrizio Zamora Victorio, de 15 años, fue emboscado mientras caminaba cerca de su vivienda. Cuatro disparos acabaron con su vida.

    De acuerdo con la Policía Nacional, este crimen estaría relacionado a una venganza dentro de un grupo conocido como “Los Cubanos”, tras acusaciones internas de “soplón”.

    Ambos asesinatos reflejan una violencia extrema e inusual en alguien que alguna vez fue ejemplo de superación.

    Robos a mano armada y más evidencias de su vida delictiva

    Pero la violencia de Shapiama no se habría limitado a los asesinatos. Investigaciones de la División de Homicidios revelaron su participación en asaltos a mano armada.

    En uno de los videos de cámaras de seguridad, se observa a Ronny encabezar el robo de una camioneta en las inmediaciones de un restaurante.

    Armado y sin ocultar su rostro, despoja a su víctima de las llaves del vehículo y huye junto a otros cómplices.

    Además, en su celular se hallaron alarmantes evidencias: grabaciones donde se le escucha planificando robos de vehículos (“lo hacemos dormir”, “chapamos el Toyota Rush”), videos portando armas, audios donde se jacta de su facilidad para robar. Incluso, se registraron fiestas clandestinas en las que participaba tras cometer delitos.

    Un patrón que evidenciaba una peligrosa escalada delictiva.

    Perfil psicológico: un joven que no mide consecuencias

    La pericia psicológica realizada a Ronny Shapiama es contundente: Tiende a justificar sus actos ilegales, manipula la información para mostrarse como víctima, y toma decisiones impulsivas sin medir las consecuencias. Un perfil alarmante para alguien de tan solo 19 años.

    De estrella infantil a protagonista de su propia tragedia

    El 21 de abril de 2025, la justicia dictó contra Ronny Shapiama 9 meses de prisión preventiva por homicidio calificado. Un joven que, alguna vez, fue símbolo de esfuerzo y talento, ahora enfrenta su vida más dura: la de pagar por los crímenes que la Policía le atribuye.

    Una historia triste y estremecedora que confirma cómo las luces de la fama pueden desvanecerse rápidamente si no se cuenta con una verdadera guía para el futuro.