Leonardo (Gonzalo Molina) entrará en desesperación al darse cuenta de que no podrá liberarse de la trampa de Helena, por lo que le pedirá perdón por todo lo que le ha hecho. Asimismo, le suplicará por su vida, pero la madre de Catalina tomará una radical decisión.
Salazar (Diego Lombardi) intentó que Leonardo se olvide de su amor por Renata, recordándole que es su sobrina y todo el daño que sufrió de pequeño. El criminal le aseguró que nadie merece padecer lo que él sufrió, pues fue abandonado en su casa con sus tíos.
"Ella me vendió por unas monedas, eso costó su silencio, unos cuantos soles, eso fue lo que yo costaba de niño. Por unas migajas me entregó para que mi padre me desapareciera, y nadie se entere de que él había violado a la cocinera. Ni mi papá ni mi mamá me quisieron", exclamó el esposo de Catalina envuelto en llanto.